Era él o ella? No logró distinguir, estaba un poco oscuro y
tanta gente, así que decidió acercarse. Le llamó la atención en cuanto entró,
el perfil acodado en la barra, pelo corto, nariz recta, mandíbula marcada,
varón. Pero la tersura de esa piel y una sonrisa de labios finos, expandida
hacia los costados, muy de ella. Estaba en mangas de camisa, los brazos
delgados y firmes, dedos de pianista sosteniendo un vaso de..
Foto: IG @raichijk_daniel |
-Qué tomas?
Quien preguntó fue el mozo y él-ella giró la cabeza de
inmediato. Se vieron.
Entiéndase, no se miraron, se vieron. Se quedaron colgados
del hilo de la mirada, sin pestañear. Ella, él-ella.
El mozo trajo otra cerveza, aunque nadie le había pedido
nada. Y después trajo otra, y otra, y unas cuantas más.
Para entonces, a nadie le importaba develar la incógnita.
Sólo importaba no romper el encanto.
Valeria Sampedro.
#microhistoriasdeamor