miércoles, 17 de febrero de 2021

Sobre #Úrsula y el asco de todo alrededor.


Estoy molesta, enojada, asqueada. Harta de los cartelitos con fotos de pibas muertas. Una y otra, y una más. Mentira que ni una menos, nos siguen tratando como mierda, nos matan y nos desechan como mierda. Y cuanto más nos matan, más promesas y más fotos de funcionarios con gesto compungido. El asco.

Veo a la mamá de Ursula con su cartelito y me da arcadas. No puedo imaginar con qué cara un secretario la llamó para invitarla, Patricia, lo siento mucho, sabe que el presidente quiere recibirla. Y Patricia agradecida, o perpleja, o impávida. Todavía conmocionada y sin saber para donde ir, qué hacer de su vida ahora que Ursulita no está, porque el hijo de remil putas de Martínez se la arrebató. Y lee de reojo en el zócalo de la tele que se negó a declarar, mientras busca en el placard un vestido decente para ir a casa rosada porque Alberto la recibe. ¿Le habrán mandado un remis?
Seguro que en algún momento de lo que dure esa entrevista se preguntará qué hago acá. ¿Habrá alguna frase protocolar que se diga de memoria ante tamaño dolor? Qué puta condolencia sirve, tengas el traje de funcionario que te calces si no sirvió para salvarla. Si cuando estaban a tiempo de hacer algo nadie la escuchó. Si le cerraron la comisaría en la cara porque los fines de semana no laburan. Y no atendieron la urgencia del miedo, ni sospecharon la inminencia del ataque, no le entregaron a tiempo el maldito botón del pánico y la pusieron en lista de espera. Lista de espera para salvarte. Que tupé.

Porque la reciben a la mamá de Ursula pero desde su femicidio mataron a otras cuatro mujeres, Vanesa, Mirna, Silvia, Silvana. Ahora mismo la buscan a Ivana en la zona del dique de La Falda y una no lo quiere ni imaginar, pero...
Habrá fogonazo de flashes y un sentido abrazo que será la foto de tapa de los diarios de mañana y un textual donde algún funcionario hable del Consejo interministerial de la gadorcha, que hará las articulaciones correspondientes y mas o menos lo mismo que la Mesa interdisciplinaria que anunciaron ya hace un año para abordar exactamente la misma problemática. Solo que ahora tenemos 300 muertas más que entonces.

Valeria Sampedro.